Anécdota: el año pasado, cuando Ambrose Akinmusire nos dio la lista de invitados por su concierto en el Conservatori del Liceu, un nombre resaltaba especialmente: Steve Coleman, decía el papel. «¿Es el Steve Coleman que todos conocemos?», le preguntamos, sorprendidos. «¡Por supuesto!» Al terminar el concierto, Coleman nos dijo que quería tocar en el Conservatori y compartir sus conocimientos con los estudiantes, y naturalmente dijimos que sí, que nos poníamos manos a la obra. Porque, de hecho, Coleman sólo ha actuado una vez en nuestro festival, en 1998, pero su influencia y la del movimiento que creó, M-Base, ha estado presente año tras año. Músico de una intensidad única, investigador de todo tipo de lenguajes más o menos esotéricos, Coleman y sus Five Elements son sobre todo una máquina rítmica imparable que puede llevar al oyente de un lado a otro sin descanso. Con la voz y las palabras de Kokayi, la trompeta de Jonathan Finlayson, el bajo eléctrico de Rich Brown (Anthony Tidd es baja por paternidad) y la batería de Sean Rickman, el saxo alto de Steve Coleman nos promete una noche de jazz visceral: esperad lo inesperado.
Steve Coleman, saxo alto
Jonathan Finlayson, trompeta
Kokayi, voz, textos
Rich Brown, bajo eléctrico
Sean Rickman, batería
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